ELMER
Autor: MCKEE, DAVID
Editorial: BEASCOA TRES
Páginas: 32
Dimensiones: 205 x 235 mm
Edición: 00 (01/03/2006)
He escogido este libro literario porque me trae muy buenos recuerdos de cuando empecé a realizar las prácticas en mi primera escuela. La tutora lo escogió para trabajar la amistad , el respeto y la tolerancia entre los compañeros. La primera vez que lo vi en esta escuela, la tutora lo estaba utilizando en un aula par niños de 2/3 años, pero yo creo que “Elmer” es un libro de
literatura infantil que va dirigido a niños en edades comprendidas entre 3 y 5
años. Mi análisis se va a centrar en estas edades.
Formato:
Como podemos ver, la portada es muy colorida y tiene un
elefante en el eje central. Al ver la portada este libro “nos entra por los
ojos” por sus colores, su disposición y sobre todo por este simpático elefante,
ya que los elefantes que todos conocemos no suelen tener estos colores.
El libro es de un tamaño medio, no pesa mucho y el grosor de las hojas es el
adecuado, para que a los niños les sea más fácil de manejar.
Las ilustraciones
son grandes, atrayentes y muy interesantes, puesto que dispone de una gran
variedad de colores. En ellas se puede ver reflejado lo que se cuenta en el
texto, ya que una de las cosas más importante de este libro son las imágenes,
de hecho las imágenes se corresponden con lo que se cuenta en la historia.
La
tipología de la letra es
la apropiada para niños de estas edades. Al analizar el texto, podemos decir
que la grafía es “de imprenta”. Está escrito así para que a los niños no les
suponga mucho esfuerzo identificar las letras, ya que los niños de estas edades
están empezando a identificarlas, a escribirlas y algunos incluso a leerlas.
El
vocabulario
que utiliza el autor es el conveniente para estas edades, porque no tiene
palabras con mucha dificultad y son fáciles de entender para nuestros pequeños
lectores. El espacio entre los caracteres y entre las oraciones son los
adecuados, así se consigue que el texto sea bastante claro y más legible para
los niños.
Contenido:
Tema principal: El cuento en sí, trata sobre un elefante
llamado Elmer que es de mil colores: verde, azul, blanco, rosa, amarillo… Pero
a nuestro protagonista no le gusta ser diferente a los demás, después de mucho
tiempo decide escaparse de la manada y buscar un remedio para ser del mismo
color que los otros elefantes. En su aventura descubre que ser diferente tiene
muchas ventajas. Por lo que el tema principal de este relato es ver que todos
somos iguales aunque tendamos a ser distintos, sino que esas diferencias nos
hacen especiales y esto lo tenemos que empezar a valorar desde pequeños. Todos
los conocimientos nacen de las emociones y en este sentido cuidar de la parte
afectiva y emocional de los niños es el primer paso para que el resto de
dimensiones (social, cognitiva...) se desarrollen de forma completa e
integrada... y gracias a libros como este podemos lograr que los niños se
aprecien tal y como son, ya que este es el comienzo del autoestima y la
autovaloración.
A lo largo de este
pequeño relato podemos ver que existen varios temas secundarios, como las bromas que realiza Elmer al resto de
sus compañeros, la inspiración que le surge para disfrazarse cuando se siente
diferente, etc. Todo esto lo hace para sentirse mejor consigo mismo y para estar
mejor adaptado dentro de la manada. A lo largo de la historia vemos que se da
cuenta que él es así y que no debe
cambiar para que le consideren igual al resto.
Dentro de los temas secundarios, el que más importancia tiene es la
relación que existe entre los iguales, ya que la convivencia y la
sociabilización entre los iguales son muy importantes en estas edades. Como
bien dice Bandura, los aprendizajes se adquieren mejor mediante un aprendizaje
social y la observación, para ello es necesario
que estemos en contacto con los otros. Creo que gracias a libros como este
podemos interiorizar en los niños que estar con sus iguales es bueno y que
gracias a las otras personas pueden
aprender comportamientos necesarios para una buena sociabilización y un
mejor aprendizaje.
Cabe destacar su estructura, puesto que tiene un
planteamiento inicial y un desarrollo de la historia lineal y muy completo, y
cómo todo buen libro literario, tiene un desenlace con final feliz. Dicho
desenlace, nos anima a superar nuestro miedo a ser diferente y a ser aceptado
por la sociedad en la que vivimos desde que somos pequeños.
Los
personajes que aparecen a lo largo
del libro, son animales, en este caso elefantes. Elmer es el protagonista
principal y los demás elefantes de la manada son sus compañeros, sus amigos y
su familia. Los niños se pueden identificar con Elmer, ya que a lo largo del
cuento vemos que le gusta el juego, gastar bromas, estar con sus iguales, ser
querido. Estas son características que tienen en común con los niños de estas
edades. Podemos añadir que mediante el juego (que tienen tanto Elmer en el
libro, como los niños en la vida real), se
obtienen aprendizajes basados en la experiencia y en la asimilación de
elementos de la realidad sin tener que aceptar las limitaciones de su adaptación.
Esto lo explica muy bien Piaget en su teoría estructuralista del juego. Además
pueden identificar sus propios miedos a ser diferentes y superarlo sin mucha
dificultad. Esto es característico en niños a partir de 4 años, según los datos
recogidos en “Clínica de la ansiedad y sus problemas en la infancia”.

Este libro utiliza un lenguaje natural, claro, breve y fácil de entender para niños de
edades comprendidas entre 3 y 5 años. Emplea oraciones cortas,
sencillas y muy expresivas. En el texto vemos como usa onomatopeyas, nombra los
colores y mantienen una conversación breve y habitual en estas edades, como
cuando se dan los buenos días. Estas oraciones son familiares, atractivas y
divertidas para niños de estas edades.
Valores:
Los valores que podemos
encontrar en esta lectura son:
·
La
amistad entre los personajes.
·
La
autoestima.
·
La
bondad.
·
El
humor y la alegría.
· El
ingenio y el ser optimista en algunas situaciones que nos pueden resultar
difíciles.
·
Y
sobre todo la tolerancia y el respeto a ser diferente.
En él se relata la
dificultad de aceptarnos a nosotros mismos tal como somos y nos ayuda a ver que
las diferencias que tenemos unas personas con otras no son tan importantes como
nos parecen. Nuestro pequeño amigo consigue hacer frente a su problema gracias
a su sentido del humor y a la plena aceptación por parte de sus compañeros. Creo
que el libro está bien adecuado a la edad, ya que estos niños empiezan a
relacionarse correctamente con sus iguales y se muestran independientes,
aunque es normal que en ocasiones muestren ciertas inseguridades o miedos
que antes no los tenían, como puede ser el miedo a ser diferente.
Los niños de
estas edades reconocen las emociones y los sentimientos de los demás. Por esto,
este relato nos ayuda a identificar el miedo de Elmer con nuestro propio
miedo a ser diferente. A lo largo del cuento, vemos como Elmer es capaz de
superarlo gracias a la comprensión y aceptación de los demás y que no pasa nada
por ser distintos. Como se puede apreciar, éste es un libro especialmente indicado
para dialogar sobre el valor de las diferencias individuales y para hacer
llegar a los más pequeños que cada uno es cómo es, con sus virtudes y con sus
defectos, y que por eso mismo todos somos "especiales". Igualmente se
podría trabajar algunos valores como la amistad, la bondad, el humor, la
alegría, el ingenio, el optimismo.
Además se podrían reforzar los colores, los animales (elefantes y sus
características), las formas, los números (al contar a los personajes), el
lenguaje, las diferentes formas de expresar los sentimientos, la
imaginación, la atención, etc…
Bajo mi punto de vista
pienso que el contravalor más
importante que nos podemos encontrar en este cuento es que Elmer quiere cambiar
para ser aceptado, y a los niños y algunos adultos les suele pasar eso, para
que los demás les acepten en su grupo social. Creo que en el desenlace del
cuento podemos ver todo lo contrario, y que así los niños pueden ver que no hay
que cambiarse a uno mismo, sino hay que hacer que el grupo social se adapte a
ti, porque cada uno es como es y no tenemos que intentar cambiar a nadie y
mucho menos cambiarnos a nosotros mismos para que nos acepten.
A mí este libro me ha
parecido muy enriquecedor y creo que se puede educar y preparar una gran
variedad de propósitos ideales a través de él. Como educadores podemos hacer
mil maravillas con los libros y pienso que todos los niños deben conocer
obras literarias adecuadas para ellos, como Elmer, el elefante.
He encontrado multitud
de libros de este simpático elefante, os dejo algunos títulos por si os animáis
a buscarlos:
- EL BAÑO DE
ELMER
- EL
CHAPUZON DE ELMER
- EL DIA DE
ELMER
- EL NUEVO
AMIGO DE ELMER
- ELMER EN
LA NIEVE
También os dejo un
resumen para la persona que lo quiera leer. Espero que disfrutéis tanto como lo
he hecho yo:
ELMER
Había una vez una manada
de elefantes. Había elefantes jóvenes, elefantes viejos, elefantes gordos, elefantes
altos o elefantes flacos. Elefantes así y asá, todos diferentes, pero todos
felices y del mismo color. Todos menos Elmer. Elmer era distinto. Elmer era
multicolor. Elmer era amarillo. Y naranja, y rojo, y rosa, y morado, y azul, y
verde, y negro, y blanco. Elmer no era de color elefante.
Y era precisamente Elmer
el que hacía reír a los demás elefantes. Unas veces Elmer les gastaba bromas y
otras veces ellos se las gastaban a él. Elmer era el responsable de casi todas
las sonrisas de sus compañeros de manada. Una noche Elmer no podía dormir. No
hacía más que pensar y pensar. Y lo que le rondaba la cabeza era que estaba
cansado de ser diferente. "¿Dónde se ha visto un elefante de colores?
", Se decía. "No me extraña que se rían de mí.
A la mañana siguiente,
antes de que la manada terminara de despertarse, Elmer se marchó sigilosamente,
sin que nadie se diera cuenta. Caminando por la selva, Elmer se cruzó con
muchos animales. Todos le decían: -"Buenos días, Elmer".
Y Elmer siempre sonreía
y respondía: - "Buenos días".
Después de una larga
caminata, Elmer encontró lo que buscaba: un gran arbusto. Un arbusto enorme
repleto de bayas; bayas de color elefante. Elmer cogió el arbusto con la trompa
y lo sacudió una y otra vez para que las bayas se desprendieran de las ramas.
Cuando el suelo estuvo cubierto de bayas, Elmer se tumbó y empezó a rodar una
vez y otra vez, para un lado y para el otro, y vuelta a empezar. Luego fue
cogiendo racimos de bayas y fue frotándose todo el cuerpo con ellos hasta que
no quedó ni rastro de amarillo, de naranja, de rojo, de rosa, de morado, de
azul, de verde, de negro o de blanco. Cuando terminó, Elmer tenía el aspecto de
cualquier otro elefante.
Entonces, Elmer
emprendió el regreso hacia la manada. Por el camino, se volvió a cruzar con los
demás animales. Pero está vez, todos le decían: - Buenos días, señor
elefante.
Y Elmer sonreía y
respondía, contento de que no le reconocieran: -" Buenos
días”.
Cuando Elmer llegó donde
los demás elefantes estaban, todos descansaban tranquilamente. Ninguno de ellos
se dio cuenta de que era Elmer quien se abría paso hacia el centro de la
manada. Al cabo de un rato, Elmer se dio cuenta de que algo raro sucedía. ¿Pero
qué? Miró a su alrededor: la misma selva de siempre, el mismo cielo azul de
siempre, la misma nube de tormenta que iba y venía de siempre, y por último,
los mismos elefantes de siempre. Elmer se los quedó mirando.
Los elefantes no se
movían en absoluto; Elmer nunca los había visto tan serios. Y cuanto más miraba
aquellos elefantes serios, quietos, y callados, más risa le entraba. Al final,
no pudo aguantarse más. Levantó la trompa y gritó con todas sus
fuerzas: ¡¡¡ Buuuh!!!
Los elefantes quedaron
patidifusos.- ¡Por todas las trompas!-exclamaron mientras Elmer se partía de
risa. -¡Elmer! ¿Quién si no?-.
Y todos los
elefantes rompieron a reír como nunca antes lo habían hecho. Y mientras se
reían, empezó a llover. A medida que las gotas de lluvia caían sobre Elmer,
iban dejando al descubierto sus colores. La lluvia ya había limpiado a Elmer
por completo, y los elefantes aún seguían riéndose.- Elmer- dijo un viejo
elefante, entre carcajadas-, nos has gastado muchas bromas, pero esta ha sido
la más divertida.
-Tenemos que
conmemorar este día todos los años- sugirió otro. –Será el Día de Elmer.
Todos los elefantes se
harán dibujos en la piel y Elmer se pintará de color elefante. Y eso es
precisamente lo que hacen. Un día al año, se pintan de colores y desfilan. Ese
día, si por casualidad ves un elefante con la piel de color elefante, seguro
que es Elmer.
Os dejo este enlace, en él podéis ver actividades que han planificado gracias a este maravilloso libro literario: www.educa.madrid.org/web/ctif.madridnorte/.../modeloTrabajo.doc
Fuentes de información:
·
Apuntes de Desarrollo Cognitivo de Javier
Herrero de La Salle.
·
Apuntes de Literatura Infantil de Irune
Labajo de La Salle.
·
Teoría del Aprendizaje Social de Bandura --- http://www.psicologia-online.com
Ahora está perfecto :)
ResponderEliminar¡Gracias Irune!
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